¿La tecnología influye de manera positiva el desarrollo de los niños?

¿La tecnología influye de manera positiva el desarrollo de los niños?

La tecnología es una herramienta que con el pasar de los años va avanzando y expandiéndose por todo el mundo.
La tecnología puede ser una herramienta útil e interesante si se utiliza en el lugar adecuado para ayudarnos a aprender, y no todo el tiempo ni como reemplazo de otras cosas. Estas generaciones estan muy expuestas a la tecnologia, y aunque tienen un riesgo, tambien es muy util. En esto se incluye el uso que se les de. 

Pero al parecer, estos juguetes tecnológicos pueden ser beneficiosos para el aprendizaje. Y cuanto más interactivo, mejor. Sin embargo, el mal uso de estos puede ser perjudicial. Los niños a partir de los 5 años en adelante tienen una gran habilidad para manejar aparatos electrónicos, desde teléfonos inteligentes, hasta tableta, poseen una destreza y facilidad para presionar botones y la pantalla del dispositivo con mucha seguridad.

En cualquier caso, la tecnología, en la forma de celulares y tabletas, está aquí para quedarse. Entender la tecnología y cómo funciona forma parte del currículo.

Los expertos no están descuerdo con los beneficios que dichos aparatos tecnológicos pueden generar. Es importante señalar, que como cualquier tema de educación con los mas pequeños de la casa este es un tema de educación, con los mas pequeños de la casa este es un tema que posee pros y contras y que es indispensable que los representantes le den cuidado que se merecen. 

El psicólogo Aric Sigman ha declarado con frecuencia que los niños están más expuestos que nunca a la pantalla y que este hábito debe ser cambiado, pues podría llevar a la adicción o depresión. Sigman calcula que los pequeños que nacen ahora pasarán el equivalente a un año pegado a las pantallas antes de cumplir los siete años. De ser cierto, poca gente podría negar que sea un dato preocupante. Si sólo el 9% de los niños en Reino Unido no tiene acceso a una computadora en casa o en la escuela, podría afirmarse que las pantallas son dominantes y que, al parecer, no hay vuelta atrás. Entonces, la clave podría estar en que los niños aprovechen al máximo su tiempo frente a la pantalla, descargando las mejores aplicaciones y programas que contribuyan a su aprendizaje, con las medidas necesarias para que no afecte tanto su desarrollo.